15/1/11

Mis abrazos a dónde van

Hoy me levanté con una sensación y la pregunta, qué estoy haciendo con mi vida. Responderme sería pensar en lo laboral, familiar, profesional, etc. Pero como en estos últimos días he estado de parranda, dejé que todo pasara con normalidad.
Saliendo de mi dormitorio me acerqué al tacho de ropa sucia y saqué mi chaqueta. La acerqué a mi nariz y olía a ella, a sexo. Y las imágenes de aquella noche vinieron a mi mente. Todo.

Sentado en la sala con un cigarro y un vaso de agua, me preguntaba cómo me volví una especie de donjuán. De verdad que no lo sé, siempre he sido tímido y siento que lo sigo siendo aunque no como mi etapa escolar. Mayormente no me es fácil adaptarme a nuevos grupos sociales o de amigos, pero cuando ya estoy dentro soy quien hace la chacota y el que arranca risas.

Me puse a pensar lo hecho en el mes pasado y la mitad de este, y en total fueron cinco chicas. Sexo con tres y las demás; besos y toqueteos. Y yo que había pensado parar con estas andanzas, pero nada.

Y sí, desde mediados del anteaño pasado pensé detener todo esto cuando me fijé en una chica ("N") del mismo centro pero no pasó nada. No solo era un gusto sino que con ella no pretendía tener algún affaire, la quería como mi enamorada. Pero solo fueron un par de salidas para conocernos, algunas cruzadas por el patio del local y, pocas y pequeñas conversaciones por Messenger. Mi inconstancia y quizás dejadez hizo que no surja nada.

Aún me sigue gustando pues me atrae pero no estoy pensado si debo hacer algo o quedarme en mi lugar. Era la primera vez que me gustaba una chica en tratar de enamorarla pero no sé hacerlo. Y es que, ya lo dije en anteriores posts que he tenido la suerte de ser correspondido cuando me gusta alguien.

Después de eso, pasaron los meses, cerca de siete u ocho, y vi a una chica del mismo centro que antes no sabía quién era. Me pareció linda, curiosa, dulce, tierna; para mí. Y cada vez que la veía siempre estaba con su celular hablando y hablando, y yo pensaba cómo tenía qué hacer para conocerla.

Por suerte de cosas en común llegué a conocerla pero para mi mala suerte tiene enamorado. Nunca hemos hablado en persona, solo por chat, y aún me sigue gustando. Mi interés no se ha perdido pero no me atrevo a hacer algo por respeto a su relación. Me conozco y con alguien como ella a mi lado no sería quien soy en estos días. Así que ni me atrevo a invitarte una galleta.

El hecho de estar solo es hacer lo que en verdad quiera uno, pero sin hacer daño a nadie; y así soy.
No sé por qué recién te vi y conocí cuando ya terminaba mi etapa en el centro, por qué no fue antes.