20/1/09

Con los amigos, aunque te caiga el guante

Eran cerca de las diez de las noche, faltaba sólo uno para estar completos y salir a una discoteca de Miraflores por cumpleaños de una querida amiga. Pasaban los minutos y no llegaba. Para dejar de mirarnos las caras de asados por la demora, fui al congelador y eché en tres vasos un par de hielos en cada uno. El ron que serviría debía topar el vaso. Ya lleno, sólo era cosa de empinar el codo y todo el trago adentro. Repetimos tres veces la sesión y el estómago nos ardía. Ya calientes nuestros cuerpos, llegó Paul, quien faltaba y salimos a tomar taxi.


En la discoteca, como tipos solteros, las miradas desbordan por lugar que nos permitía alcanzar la vista. Encontramos a la cumpleañera y la conversa fue típica, deseando felicidades y demás. Decidimos abrirnos hasta que nos topamos con un grupo de chicas de tres contra cuatro que éramos nosotros. Todos ya en la pista con sus respectivas parejas hacían lo suyo. Nos tomábamos fotos con ellas como amigos de antaño, todo por efecto alcohol. Uno de nosotros no tenía pareja y decidió bailar con la onomástica.

Pasaban los minutos en conversa y el grupo estaba hecho con nuevas integrantes. Roni, quien había terminado de mover el esqueleto con la cumpleañera se me acerca y me habla al oído.

-- El ex de L (cumpleañera) en pleno baile con ella, se la llevó y me ha dicho que no me le acerque porque dice que es su flaca.
-- Puta madre huevón, pero, ¿tú que le dijiste?
-- Que nada, que somos amigos del colegio y nada más.
-- Ya, ya… No te hagas roche y haz todo normal.
-- Nada huevón, que me busque y le saco la conchesumadre.

En esa noche quienes estaban más que picados era Jason quien bailaba con cuatro chicas a la vez y Paul que se resbaló luego de darle propina al barman y embarró la camisa de apariencia homosexual. Roni y yo éramos los más razonables. Fue entonces que después de levantar a Paul de su desgracia caída, Roni se me acerca otra vez diciéndome: Ahora si le saco la puta madre.

Lo sigo, a paso firme y busca al ex empujándolo. En ese instante pensé además de ser tres de la mañana y temprano aún, vendrían los de seguridad a sacarlo y a nosotros por ser amigos de él. Llegan un par de mastodontes al lugar de la riña, lo levantan y sacan hasta la puerta. Ya no quedaba otra, era hora de retirarse y buscar a Jason, que de paso estaría más perdido que Marco en busca de su vieja y Paul limpiándose como niño que aprende a dar sus primeros pasos.

Salimos a alcanzar a Roni, cuando detrás de nosotros también salía L con su ex, y para colmo abrazados, junto con su grupo de siete puntas, todos hombres excepto una. Sabía lo que vendría, estábamos en desventaja y era hora de preparase y prendí un cigarro mientras Paul compraba una galleta en la tía de afuera. (Jason estaba más mamado que contarlo era demás porque estorbaría).

Veo el espectáculo corto que dará Roni para buscarle la bronca. Se le acerca y lo empuja sin ascos. Miro rápido a Paul con fin de darle señas y me acerco a la mecha metiéndole un puñete en la cara al ex hasta verlo caer. Ya en el suelo es cuestión de que no se levante y darle todo lo que se pueda para que no se atreva a meterse con quienes no deben. Nunca se metieron los seis tipos que andaban en el grupo del ex de mi amiga, ¿maricones o diplomáticos?.

Me levanta en peso un policía, nos separa y me llevan al patrullero. Ya con fines de que no nos detengan y nos cagen más la noche, la única forma es meterle letra al tombo o darle propinón. Optamos por lo primero. Ya caminando por la avenida Larco, me cuentan que mientras yo estaba con el ex en el suelo, Roni y Paul repartieron unos regalitos pues pensaban que su cara era un balón de fútbol y estaban entrenando a darle mejor a la pelota. Imaginaría como hubiera sido una pelea entre mujeres, o acaso, ¿ellas no se jalan de los cabellos y se arañan como gatitas fieras?.

En todo caso, por cual que sea, acaso uno no siempre tiende a meterse en líos que no sea suyos por defender al amigo quien conoces desde que se comía los mocos, se orinaba en el salón del colegio y anda contigo en las buenas y malas de tu vida, cuando te ves cagado por terminar una relación sentimental y chupar contigo hasta dormir donde sea, ellos son aquellos que siempre estarán ahí.

(1) De izq. a der. Roni, yo (implicados) y Miguel (no estuvo el día de los hechos).

(2) Google.com

5 comentarios:

Anónimo dijo...

En eso podemos coincidir pero a la otra no defiendas porque será a ti quien le saquen la m... jjaja chévere

Anónimo dijo...

dijo Anónimo...
no me acuerdo aH ,
cuando fue es0 ??
hahahaha

Anónimo dijo...

Ahhh eres malo, pero sino te gustaba cagar a la gente ja ja ja. Naa mi estimado, se comprende. Al que se mete con la gente se le golpea hasta que aprende... XD

Buen post, espero el próximo.

saludos.

ácrata.

Anónimo dijo...

ah carai asi que ninja saliste jaja.. va ahi.. cuando sale el otro post.

Cush dijo...

Chevere los amigos antes que nada verdad.